
Así es, nada es abstracto, indeterminado, todo tiene su por qué, todo tiene su
razón de existir.
Porque tengo la seguridad que de nada sirve estar sentada esperando que las
cosas pasen, lleguen, si puedo salir a buscarlas, si puedo salir a pelear para
conseguir lo que quiero…
Muchas veces me equivoqué, y muchas más lo voy a hacer, pero gracias a los
errores descubrí el camino que parece ser el correcto… y no tengo la seguridad
que realmente lo sea, pero si no lo es tampoco voy a arrepentirme en “haber
perdido tiempo” porque nada fue en vano, no fue tiempo perdido, porque si
primero no hubiera conocido el límite de la tristeza no tendría la capacidad de
determinar lo que realmente me hace feliz, porque antes de acertar me equivoqué,
porque antes de ganar aprendí a perder, porque antes de aprender llene mi cuerpo
de cicatrices con cada caída.
Si no hubiera sido capaz de superar cada obstáculo, si cada desafío que el
destino puso en mi camino lo hubiera tomado por el lado de que la vida es
injusta hoy no podría decir que siento que crecí, se que aún me falta mucho,
pero también sé que cada paso que he dado está completo, nada quedó por la
mitad, nada lo dejé para después porque no conseguí fuerzas, cuando no había
salía a buscarlas. Porque no me detuve a pensar “por qué a mí?” porque eso sería
un pensamiento demasiado egoísta… es el camino más fácil, porque por qué no a
mí? gracias a eso hoy soy como soy…